La Monarquía Hispánica nació en 1479 de la unión dinástica de la Corona
de Castilla y de la Corona
de Aragón por el matrimonio
de sus respectivos soberanos Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, conocidos como los Reyes
Católicos. Desde entonces la Monarquía Católica, como fue conocida después de la
bula papal de Alejandro VI de 1494, fue agregando diversos
"Reinos, Estados y Señoríos" en la península ibérica, en el resto de
Europa y en América hasta convertirse bajo los reyes de la Casa
de Austria en la
Monarquía más poderosa de su tiempo.
Por lo tanto se puede decir que la monarquía hispánica estuvo marcada por
el reinado de los Austrias, especialmente Felipe II y Carlos V.
Carlos V era nieto de Fernando el Católico e hijo de Juana la Loca y Felipe
el Hermoso. Su madre, Juana la Loca, se convierte en la primera en la línea sucesoria
debido a la muerte de sus otros hermanos pero debido a su enfermedad no le es
posible gobernar por lo que esta tarea recae en su hijo Carlos V, el cual
consigue llegar a este punto de manera
casual puesto que sus antecesores no eran los primeros en las líneas sucesorias.
Centrándonos un poco más en la monarquía hispánica cabe destacar que en
época de los Austrias no es posible hablar todavía de una España unificada ya
que el tipo de gobierno que se utilizó fue una monarquía compuesta, es decir,
los reinos constituyentes continuaban después de su unión ( aeque principaliter) siendo tratados
como entidades distintas, de modo que conservaban sus propias leyes, fueros y
privilegios.
Por lo tanto, cada territorio conservaba su particularismo y organización
política pudiéndose dividir según la capacidad de actuación del rey.
Una característica esencial es la existencia de múltiples poderes. La
Monarquía Hispánica se va a ir castellanizando pero esto no quiere decir que
algunas monarquías no se beneficien de esto para poder asentar su poder. Es el
caso por ejemplo de Gattinara, el cual fue canciller de Carlos V, procedía de
la zona del Franco Condado y gracias a su apoyo a Carlos V consiguió más
influencia a nivel local, esto es lo que los historiadores denominan “ pacto
entre élites y monarquía”.
Otro ejemplo es el conde de Egmont, uno de los primero líderes de la
revuelta que años antes había luchado con Felipe II en la batalla de San
Quintín contra los franceses.
Por otro lado, en la Monarquía Hispánica la estructura administrativa e
institucional era muy frágil, tenía una serie de instituciones en la corte, los
denominados consejos; pero a nivel de cada uno de los territorios las
instituciones eran mínimas.
Castilla era el territorio más destacado gracias a los corregidores los
cuales eran enviados del rey que se convertían en los principales jefes en las
ciudades más relevantes de Castilla.
En cuanto a la corte encontramos el sistema polisinodial, el cual es una
red de consejos, es decir, organismos de diez o doce personas que discuten
sobre un determinado tema. Estos consejos estaban divididos temática o
territorialmente y poseían un carácter administrativo, consultivo y judicial.
Estos consejos no se pueden considerar unipersonales puesto que eran oficios
para toda la vida y se transmitían de padres a hijos. Además, dependían de la
propia coordinación de los consejeros.
Respecto al papel de las redes sociales cabe destacar que lo que marcó el
inicio de la globalización no fueron las instituciones sino las relaciones
entre las personas ( familiares, amigos…) por lo que de esta manera un mercader
sabía que su producto había llegado al destino correcto gracias a las cartas
con su familia ya que a través de dichas cartas le transmitían información.
En conclusión, el hecho de que España no se considerase un Estado unificado
nos proporciona un cierto panorama de homogeneidad, es decir, lo que ocurría en
una ciudad no tenía por qué ocurrir en otra. Además, se puede observar que las características
de la Monarquía Hispánica difieren en lo que entendemos por absolutismo ya que
observamos que en la práctica el poder del rey está mucho más limitado hasta el
punto de que el rey no podía comportarse como un tirano puesto que podía ser
ejecutado o asesinado.
Estimada Melody:
ResponderEliminarEn lugar de "homogeneidad" en el último párrafo, creo que te refieres a "heterogeneidad". Por lo demás la entrada está bastante bien.
Atentamente,