Álvaro de Bazán (Granada 1526 - Lisboa 1588)
Don Álvaro de Bazán y Guzmán, marqués de Santa Cruz, procedente de familia ilustre de marinos y militares, fue uno de los hombres más importantes dentro de la marina durante el reinado de Felipe II de España.
Hijo de Álvaro de Bazán el Viejo, importante general de galeras del emperador Carlos I de España y V de Alemania, y de Ana de Guzmán, y nieto de Diego Ramírez de Guzmán, primer conde de Teba.
Su familia procedía, por tanto, del valle de Baztán, en Navarra, pero tras la participación de su abuelo en la conquista de Granada en 1492, la familia residía en dicha ciudad.
En 1529 su padre solicitó para él el hábito de caballero de Santiago, siendo armado un año después en Guadix.
Educado en Gibraltar, en 1535 se le conceden los cargos de alcaide y capitán del castillo en dicha plaza.
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| Batalla de Muros |
En 1538 participa en la batalla de Muros, junto a su progenitor, saliendo victorioso contra los franceses.
En 1544, combate por primera vez, saliendo victorioso, contra unos corsarios franceses cerca de Galicia.
Diez años después obtendría el primer mando, de cuatro buques y 1.200 hombres, con el encargo de proteger los barcos procedentes de América, contra la piratería francesa.
Felipe II accede al trono en 1556, en este momento la situación es muy grave para la monarquía hispánica, debido a los constantes ataques de la armada otomana y la incursiones de los corsarios de Argel y Trípoli.
Álvaro de Bazán, bajo el mando de García de Toledo, participará en la reconquista del peñón de Vélez de la Gomera, saliendo victorioso. Tras la victoria, se le encomienda la misión de atacar y reducir el refugio pirático de la desembocadura del río Martín, próximo a Tetuán.
En 1568 se nombra a Bazán “Capitán General de las Galeras de Nápoles”. En poco tiempo limpia las aguas de piratas y construye una escuadra de 38 galeras. Como recompensa a los servicios prestados a la corona el rey le concede el título de Marqués de Santa Cruz.
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| Mapa de la Batalla de Lepanto |
Pero la contienda más importante en la que participaría, fue la Batalla de Lepanto, consiguiendo ser el verdadero capitán general de la Armada de la Santa Liga.
A partir de este momento, sus acciones pasarán del Mediterráneo al Atlántico, nuevo escenario naval
prioritario para la Monarquía.
En 1576, obtendría el título de capitán general de las Galeras de España, cuatro años después, participó en la ocupación de Portugal, conquistó las islas Azores, que hasta entonces habían sido lugar de resistencia contra Felipe II, y que Francia pretendía separar del resto de Portugal (1582-1583).
Pero tras estas ofensivas, Felipe II centró su atención en Inglaterra, con la intención de conquistar la isla. Finalmente, el 26 de enero de 1586 el rey ordenó preparar una escuadra para el ataque.
Pero por causas diversas la acción no fue llevada a cabo, con el consiguiente enfado del rey, que cesó a Bazán el 4 de febrero de 1588. Bazán conocerá su cese en su lecho de muerte, cinco días después, en Lisboa.
Debido a sus muchos éxitos, fue considerado un héroe, y por ello, varios literatos de la época, escribieron epitafios en su honor.
Algunos de ellos fueron los siguientes:
Epitafios:
Góngora:
No en bronces, que caducan, mortal mano,
Oh católico Sol de los Bazanes
Que ya entre gloriosos capitanes
Eres deidad armada, Marte humano,
Esculpirá tus hechos, sino en vano,
Cuando descubrir quiera tus afanes
Y los bien reportados tafetanes
Del turco, del inglés, del lusitano.
El un mar de tus velas coronado,
De tus remos el otro encanecido,
Tablas serán de cosas tan extrañas.
De la inmortalidad el no cansado
Pincel las logre, y sean tus hazañas
Alma del tiempo, espada del olvido.
(Luis de Góngora y Argote, 1588)
Lope de Vega:
El fiero Turco en Lepanto,
En la Tercera el Francés,
Y en todo mar el Inglés
Tuvieron de verme espanto.
Rey servido y patria honrada
Dirán mejor quién he sido,
Por la cruz de mi apellido
Y con la cruz de mi espada.
(Lope de Vega, 1588)
Lope de Vega sirvió como soldado a las órdenes del Marqués de Santa Cruz.
Bibliografía:
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